Desde hace poco, la naturaleza de los insectos que ocupan mi cultivo ha empezado a llamarme la atención. Principalmente un insecto que nunca había visto antes. Al principio le huí pues pensé que se trataba de una avispa, y cuando aumentaron más y más en número, creí que ya me tocaría sederles el control de mi territorio. Sorpresivamente, después de un poco de investigación, me dí cuenta de que se trataba nada más y nada menos que de una mosca. Un insecto perteneciente a la familia Syrphidae que aunque bastante inofensivo, utiliza los arreglos de colores de las avispas para engañar a sus depredadores (las pueden distinguir de las avispas porque solo tienen 2 alas y por sus grandes ojos(fotografía), las avispas tienen 4 alas). Estas moscas imitan tan bien a las avispas que algunas se mueven como si fueran avispas tratando de picar cuando son capturadas. Después me pregunté porque habían aumentado tanto en número, si al principio no había ninguna y ahora las veo muy seguido. Las respuestas, fueron varias. Estas moscas se alimentan de nectar y polen, o sea que el aumento de flores que ha habido pudo haber causado un aumento en su población. Sin embargo, después me tope con una razón aún más convincente. Resulta, que las larvas de esta mosca, se alimentan de pulgas de plantas (aphids en inglés, horribles bichos que causan demasiadas molestias, es decir, son una plaga) y por lo tanto, una alta población de estas moscas, indica una colonia establecida de pulgas. Busqué planta por planta, y finalmente, encontré una bastante infestada de estos insectos, y como era de esperarse, había al lado de cada colonía de pulgas un par de hermosas larvas de «hover fly» (nombre con el que son conocidas en inglés por su habilidad para mantener un vuelo estático). Ahora bien, esto aclaró mucho para mi una cosa que alguna vez me habían mencionado. Si uno aplica un insecticida, asesina tanto a insectos que dañan las plantas como a sus depredadores, estos últimos, se reproducen normalmente mucho más lento y por lo tanto, si deja de aplicarse el insecticida, hay un rápido crecimiento de las poblaciones de insectos dañinos. Como era de esperarse, no hay que cambiar las cosas si no están dañadas y la naturaleza tiene millones de años para probar que han funcionado. ( la foto, es cortesía del Elachee Nature Center, Gainesville, GA) De nuevo, gracias a mis lectores por su interés.
Un aliado
Desde hace poco, la naturaleza de los insectos que ocupan mi cultivo ha empezado a llamarme la atención. Principalmente un insecto que nunca había visto antes. Al principio le huí pues pensé que se trataba de una avispa, y cuando aumentaron más y más en número, creí que ya me tocaría sederles el control de mi territorio. Sorpresivamente, después de un poco de investigación, me dí cuenta de que se trataba nada más y nada menos que de una mosca. Un insecto perteneciente a la familia Syrphidae que aunque bastante inofensivo, utiliza los arreglos de colores de las avispas para engañar a sus depredadores (las pueden distinguir de las avispas porque solo tienen 2 alas y por sus grandes ojos(fotografía), las avispas tienen 4 alas). Estas moscas imitan tan bien a las avispas que algunas se mueven como si fueran avispas tratando de picar cuando son capturadas. Después me pregunté porque habían aumentado tanto en número, si al principio no había ninguna y ahora las veo muy seguido. Las respuestas, fueron varias. Estas moscas se alimentan de nectar y polen, o sea que el aumento de flores que ha habido pudo haber causado un aumento en su población. Sin embargo, después me tope con una razón aún más convincente. Resulta, que las larvas de esta mosca, se alimentan de pulgas de plantas (aphids en inglés, horribles bichos que causan demasiadas molestias, es decir, son una plaga) y por lo tanto, una alta población de estas moscas, indica una colonia establecida de pulgas. Busqué planta por planta, y finalmente, encontré una bastante infestada de estos insectos, y como era de esperarse, había al lado de cada colonía de pulgas un par de hermosas larvas de «hover fly» (nombre con el que son conocidas en inglés por su habilidad para mantener un vuelo estático). Ahora bien, esto aclaró mucho para mi una cosa que alguna vez me habían mencionado. Si uno aplica un insecticida, asesina tanto a insectos que dañan las plantas como a sus depredadores, estos últimos, se reproducen normalmente mucho más lento y por lo tanto, si deja de aplicarse el insecticida, hay un rápido crecimiento de las poblaciones de insectos dañinos. Como era de esperarse, no hay que cambiar las cosas si no están dañadas y la naturaleza tiene millones de años para probar que han funcionado. ( la foto, es cortesía del Elachee Nature Center, Gainesville, GA) De nuevo, gracias a mis lectores por su interés.
2 respuestas a “Un aliado”
Interesante. :)
Q insecto tan interesante. No había oído jamás de él.