Rompo acá un poco el tema de mi blog (como ya se habrán dado cuenta que suelo hacer de vez en cuando), para hablar un instante sobre la catastrofe que está ocurriendo en este momento en los Estados unidos de América. Como ya todos deben saber, el huracán dejo a St.Louis vuelta una porquería, a miles de personas sin hogar y miles de millones de dolares en perdidas. Pero eso sí, esto ya estaba anunciado.
No debe ser algo desconocido para ustedes que el ilustrisimo presidente de los Estados Unidos decidió no ratificar el protocolo de Kioto hace ya algún tiempo siendo una de las naciones que más contaminación ocasiona en el planeta y que para los americanos esto no fue la gran cosa. Y ahora, ya es muy tarde para llorar.
No debe ser algo desconocido para ustedes que el ilustrisimo presidente de los Estados Unidos decidió no ratificar el protocolo de Kioto hace ya algún tiempo siendo una de las naciones que más contaminación ocasiona en el planeta y que para los americanos esto no fue la gran cosa. Y ahora, ya es muy tarde para llorar.
Es evidente que la contaminación en este planeta provoca cambios climáticos indeseados que vuelven las cosas más extremas (inviernos más frios, veranos más calientes). Ahora bien, nuestros amigos los estadounidenses decidieron no hacer caso, ahorrarse unos pesos y seguir volviendo el planeta una basura, literalmente. Pues bien, como dice el dicho «a lo hecho pecho». La humanidad tiene que darse cuenta de sus errores y aceptar las consecuencias de sus acciones frente a la naturaleza. Espero que no tengan que agravarse más los fenómenos climáticos para que se den cuenta de que ya estuvo bien, que ya estamos debiendo y no nos está alcanzando para pagar la cuenta.
Que toca empezar a devolvernos y que pasos pequeños como el protocolo de Kioto son cosas que nos hacen gastar dinero ahora para ahorrarlo después y más que dinero, ahorrarnos vidas humanas. Como era de esperarse, pagan por ignorantes, nuestros amigos los norteamericanos. Ojalá esta lección les sirva para elegir mejor a sus dirigentes políticos.
Una respuesta a “Víctimas de la ignorancia”
Sabia naturaleza? No lo sé…